Los caminos que llevan al jazzLa escena musical madrileña está hiperpoblada de salas que se han hecho eco del boom de la música electrónica de los últimos años. El techno, la música house, o el electro, entre muchos otros, son el principal reclamo para los jóvenes del país, y como capital, Madrid no es ajeno a las corrientes que sacuden las pistas de baile.  Con las discotecas conviven los garitos de rock y los conciertos en directo, que convocan a una considerable masa social; y al margen de todo ello, en un ecosistema artístico completamente diferente, sobreviven los clubes de jazz.

Espolvoreados por los rincones más ilustres de la ciudad, las salas de jazz han aguantado heroicamente las sacudidas que los nuevos estilos le han ido propinando con el paso del tiempo. Han subsistido a la más amplia variedad de géneros, quizás porque los pioneros del jazz, desde África hasta los campos de algodón de Estados Unidos, han luchado desde siempre por sobrevivir.   El instinto de supervivencia va íntimamente ligado a él. No obstante, y a pesar de ser un estilo musical fácilmente reconocible, siempre ha sido muy complicado de definir, debido a la inmensidad de posibilidades que alberga entre sus partituras. Para ayudarnos a comprender mejor el jazz, hemos hablado con Cheryl Walters, profesora y músico de jazz en Madrid desde hace más de veinte años.

Pero, ¿cómo podernos acercarnos al jazz en Madrid? La variedad de salas es bastante amplia, y en poco más de una hora de recorrido podemos completar un itinerario que incluye cinco clubes prestigiosos de la ciudad.

Mapa Jazz

Empezamos en el Segundo Jazz Club, situado a media distancia de la glorieta de Cuatro Caminos y la zona de Nuevos Ministerios. Esta sala ha ofrecido conciertos y jam sessions desde el año 1988, y no sólo de jazz, sino también del mejor rock and roll de los sesenta, los setenta y los ochenta.

Caminando por Santa Engracia y atravesando la plaza de Alonso Martínez, llegamos al Bogui Jazz, junto a la Plaza de Chueca. El Bogui Jazz fue inaugurado en julio de 2005; desde entonces, por su escenario han pasado varios de los artistas nacionales más reconocidos, y también algunos del panorama internacional.

Por la calle Alcalá y cruzando la Carrera de san Jerónimo llegamos a la zona de Huertas, donde tenemos dos opciones: el Café Jazz Populart, con más de veinticinco años de conciertos, y el Café Central, a tan sólo doscientos metros de distancia, veintidós años de jazz en directo y más de diez mil conciertos.

Para terminar, atravesamos la Puerta del Sol, avanzamos por Gran Vía y llegamos a Plaza de España. En Martín de los Heros, una de las calles con más oferta cultural de Madrid, encontramos El Plaza Jazz Club, y nos reunimos con el jefe de la sala, Luis Peña, quien nos habla del club, de su historia y de esa capacidad de adaptación y supervivencia del jazz.

En total, 6’2 kilómetros y una hora y veinte minutos de ruta para conocer un poco más de un género que, de África a Nueva Orleans, y llegando hasta Madrid, persiste impulsado por una pasión ancestral.