El pasado lunes 14 de marzo comenzó un paro indefinido dentro del sector de los transportistas, convocado por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías (una asociación que representa a transportistas autónomos y pymes). Se realiza en protesta por los altos precios del combustible, además, de buscar una mejora en las condiciones laborales de los trabajadores.
En un comunicado, emitido por la plataforma, afirmó que “el 90% de las empresas de transporte tanto medianas como pequeñas nos encontramos en una situación económica de quiebra total, al igual que las condiciones laborales son de total precariedad en todos los sentidos. Consecuencias que pagan de manera directa todos los conductores asalariados a los cuales defenderemos en las demandas exigidas».
El detonante principal de la convocatoria para el paro fue la subida del precio de los combustibles, que se ha visto muy afectado tanto antes como después de que empezara la guerra desatada entre Rusia y Ucrania. Sin embargo, la segunda reivindicación clave son las diferencias existentes en España entre los autónomos y pymes respecto a grandes patronales.
Lo que los transportistas exigen en el paro es que se prohíba la contratación de servicios de transporte de mercancía por carretera por debajo de los costes de explotación, así como limitar la intermediación en los contratos a un solo contratista. Por otro lado, piden que se prohíba con una ley que el conductor sea el encargado de la carga y descarga, además quieren un decreto que limite el tiempo máximo en el que se realicen estas labores. Por último, exigen la jubilación a los 60 años al calificar la profesión de alto riesgo. Estas Protestas, por su lado, han causado una problemática en el área comercial, pues ha hecho que varias empresas y varios comercios pequeños tengan que subir los precios de sus mercancías.
Por otro lado, después de varios días de huelga, la Ministra de Transporte, Raquel Sánchez, anuncia un acuerdo entre el gobierno y el Comité Nacional De Transportes por Carretera. Un acuerdo que incluye una rebaja de 20 céntimos por litro en el combustible hasta el 30 de junio. Fue una reunión de aproximadamente 12 horas para poder plantear diferentes soluciones a lo que los transportistas piden y así mismo para que ellos puedan retomar sus actividades y así mismo los ciudadanos no se vean mas afectados por la situación.
El acuerdo planteado, señala que las ayudas al sector ascenderán a más de 1.050 millones de euros. Según el desglose del Ministerio, más de 600 millones se destinarán a conceder una bonificación de 15 céntimos por litro de combustible a los profesionales de este colectivo, a lo que se sumarán como mínimo otros 5 céntimos aportados por las petroleras. Los cálculos del Gobierno apuntan a un ahorro mensual de unos 700 euros por camión que funciona con gasóleo. Se habla de que este acuerdo entre en vigor a partir del 29 de marzo.
Sin embargo, aunque este documento incluye ayudas directas, ley de cadena alimentaria, devolución del combustible, entre otros aspectos, la plataforma de transportistas aún no se sienten conforme pues denominan el acuerdo como “migajas”. Además, afirman que en cuanto al tema de la gasolina «Tendrían que bajar más de 60 céntimos para que pueda ser suficiente”.
Por lo tanto, el Presidente de la plataforma de transportes, Manuel Hernández, no esta dispuesto a desconvocar la huelga hasta que ellos no se puedan reunir con la Ministra de Transporte y así mismo, poder llegar a un verdadero acuerdo, que como él lo menciona no quiere que se trate de “limosnas”.