exilio universitarioLlegado el mes de noviembre de 2012 y en pleno otoño miles de universitarios ya preparan sus primeros exámenes parciales del año. Sin embargo este año muchos otros no están agobiados por las primeras pruebas del año, ya están en casa: la subida de tasas universitarias ha impedido que puedan continuar estudiando.

Este verano el consejo de ministros resolvió la aplicación de una subida en las tasas universitarias para la reducción del déficit. Con este aumento el alumno abona entre el 15 y el 25 por ciento del coste real de su matrícula. El gobierno dejó a elección de cada comunidad autónoma el porcentaje de subida que se llevaría a cabo en las universidades de su territorio, por lo que no en todas el alza en el coste de la matrícula ha sido el mismo: en Cataluña se paga hasta un 66,7 por ciento más y se ha implantado un sistema de umbrales; en Madrid se registra una subida de 5,8 euros por crédito; en Canarias subirán una media del 40 por ciento y en Castilla y León el incremento llegará hasta el 20 por cien del coste efectivo de la matrícula.

Pero esto son datos de primeras matriculaciones y no sólo se aplican subidas a éstas. Los repetidores serán más castigados aún. Aquellos alumnos con asignaturas de segunda, tercera o cuarta matriculación pagarán hasta el 100 por cien de la matrícula en el último caso. Manuel Martín Rubio se encuentra en esta situación y, aunque se ha matriculado en su quinto curso de periodismo en la Universidad Complutense, ha vuelto a Logroño con su familia y, por tanto, no asistirá a las clases.

Pero el de Manuel no es un caso aislado. Sonia González se encuentra en una situación similar tal y como comenta a continuación.

Los datos son claros y los facilitan las propias universidades. En la Autónoma de Barcelona asocian directamente la reducción del número de matriculaciones con el aumento del coste. El centro catalán prevé un impacto del 15 por ciento de disminución a causa de los nuevos precios; en total alrededor de 810 estudiantes menos. En el caso de la UNED, la mayor universidad de España, la matrícula ha caído un 6 por ciento; y esa cifra asciende hasta el 40 por ciento si se observa la cantidad de alumnos mayores de 25 y 45 años.

Aunque aún no se han recabado los datos definitivos de matriculaciones la Federación de Asociaciones de Estudiantes (FAEST) asegura que se ha producido un descenso del 10 por ciento, es decir, cerca de 150.000 estudiantes menos. Las movilizaciones en contra de la política educativa adoptada por el gobierno de Rajoy no se han hecho esperar. Fernando Ángel Moreno es miembro de una de las plataformas de protesta.

Por su parte Ignacio Urquizu, profesor de la Facultad de Ciencias de la Información de la UCM, analiza la actual situación y los factores que han conducido a la misma.