Las redes sociales nacieron como un nuevo medio de comunicación entre usuarios que se conectaban y compartían contenido, intereses y métodos de entretenimiento. Pero hoy en día empresas, marcas y personajes públicos han sabido evolucionar con ellas y adaptarse a sus públicos y a sus necesidades. Facebook es la red social que tenemos en mente como pionera, aunque en 1995 nació Classmates.com como una de las primeras redes conocidas, seguida de SixDegrees, LinkedIn, Xing, Youtube, Twitter e Instagram.

Las principales redes sociales abastecen a todo tipo de públicos, ofreciendo algún servicio que marque la diferencia. Actualmente los jóvenes están más enganchados a Instagram, sobre todo en el rango de 18 a 24 años. En ella se comparten fotos y videos, también se pueden mandar y recibir mensajes. Además de tener “historias”, contenido audiovisual que permanece 24 horas. Instagram cuenta ya con más de 800 millones de usuarios.

La otra red social de referencia es Facebook que, aunque sea utilizada por un público más adulto, también es una de las favoritas entre los jóvenes. Tiene un formato muy similar a la anterior, pero con un carácter más privado, otro tipo de fotografías “menos profesionales”. Con un diseño totalmente diferente, se da más información personal del usuario y se tiene más en cuenta la privacidad, reservando la visualización del contenido propio a amigos y familiares.

Dejando a un lado la publicación de fotografías y videos, la red social para conocer toda la actualidad es Twitter, su función principal es mantener a toda la sociedad conectada a través de los tuits o textos de 280 caracteres, convirtiéndose en un miniblog en algunas ocasiones, siendo información a tiempo real.

Las principales ventajas de las redes sociales son que la comunicación es instantánea y a tiempo real, que la distancia deja de ser un obstáculo, que nos mantienen actualizados acerca de temas de interés, además permiten asistir a eventos, participar en actos y conferencias. También pueden ser de gran ayuda para actividades formativas como ocurre en grupos universitarios o de especialistas en diferentes disciplinas, e incluso con personas más cercanas. Por otro lado favorecen contactos afectivos nuevos como la búsqueda de pareja o amistad; también se está lanzando la búsqueda de trabajo a través de ellas.

Sus principales desventajas son su peligrosidad si la configuración de nuestra privacidad no está efectuada correctamente, pues exhiben nuestra intimidad; el incumplimiento de las normas de uso, que tiene como consecuencia el cierre del perfil; la falsificación de personalidad; la deficiencia en el control de datos; la pérdida de tiempo y dependencia; la apropiación de los contenidos; y por último el Ciberbullying y Grooming, ya que las redes sociales pueden ser utilizadas por criminales para conocer datos de sus víctimas en delitos como el acoso y abuso sexual, secuestro, tráfico de personas, etc.

Las redes sociales pueden provocar una adicción que llegan a modificar muchas situaciones, rutinas y hasta sus relaciones interpersonales. La mayoría de la gente usa las redes sociales porque estas permiten expresar distintas versiones idealizadas de uno mismo, muchas no son ciertas sino mentirosas y hasta están los que se ocultan bajo el anonimato. Esconder lo negativo y mostrar el éxito ha producido un descenso en la valoración que se tienen a sí mismos aquellos que están con problemas o que consideran que a los otros les va mejor. Las razones por las cuales un usuario muestra una vida feliz, cuando a veces no la tiene responde a muchas motivaciones, entre ellas podemos destacar la necesidad de aprobación, algo esencial en los seres humanos, ya que es casi natural querer que nos acepten. Hay una necesidad de obtener cierto estatus y convencer a los demás de que se tiene una posición económica o de liderazgo que se pueda asociar al éxito y la prosperidad.

Hay personas que dependen extremadamente de ese sistema de información. El tiempo que dedican a su uso es excesivo y además lo hacen de forma a veces casi extrema. Algunas de las señales que nos indican cierta adicción y dependencia a las redes sociales son privarse del sueño por más de 5 horas para estar conectado a la red; descuidar el contacto familiar, las relaciones sociales, el estudio o el cuidado de la salud; pensar en la red constantemente, incluso cuando no se está conectado a ella; intentar limitar el tiempo de conexión sin poder conseguirlo y mentir sobre el tiempo real que está conectado a redes sociales.

El sociólogo Javier de Rivera nos responde a algunas preguntas inquietantes sobre las redes sociales y su intromisión entre los jóvenes explica que las redes sociales pueden estar provocando una pérdida de sensibilidad, autores como Franco Berardi, dice que el uso masivo de la televisión, y ahora de las redes sociales, internet, produce una pérdida de sensibilidad a la hora de comunicarnos con los demás. Asimismo, de Rivera recomienda desconectarse de vez en cuando, un fin de semana, un día, lo que cada uno pueda, pero plantearse períodos de desconexión para tomar la medida de tu verdadera dependencia con esos medios y para conectarse a uno mismo.

Las respuestas, opiniones y valoraciones que podemos obtener de los jóvenes entrevistados, son en primer lugar, que la red social más utilizada es Instagram, seguido de Twitter y/o Facebook. En cuanto a la dependencia de estos a las redes sociales es que la gran mayoría son incapaz de estar más de dos horas desconectados, en referencia a la dependencia, hay diferentes opiniones, algunos piensan que sí podrían dejar de usarlas en cualquier momento y otros confirman que ahora mismo no podrían dejar de utilizarlo. Sin embargo, el promedio de utilización de las redes sociales es de mínimo 5 horas, pocos difieren en menos tiempo.

En la encuesta realizada acerca de las redes sociales, hemos obtenido varios resultados significativos. Observamos a más de un 70% de los jóvenes encuestados utilizan tres o más redes sociales. Los jóvenes consideran que la principal ventaja de las redes sociales es la posibilidad de estar informado de manera inmediato. Como principal incoveniente, encontramos que los datos y contenido personales puedan ser utilizados por terceros.

Destacamos a Instagram como la red social más utilizada, por encima de Twitter que se encuentra en segundo lugar. Por último, destacamos que en torno al 60% de los encuestados afirma poder ser capaz de poder pasar un día entero sin utilizar las rede sociales. Este hecho demuestra que, pese a que los jóvenes utilizan muchas redes sociales, la mayoría de ellos no es adicto a ellas.